Presentación

Cümen está conformado por un equipo de salud que integran profesionales de diferentes áreas. Fundamentalmente psicólogos, psicopedagogos, terapista ocupacional, obstétrica maestra especial y fonoaudióloga.
Este equipo realiza un abordaje integral de la persona y la familia con el objetivo de promover y favorecer la salud.

sábado, 7 de abril de 2012

ONU- Salud

El seguro de enfermedad es sólo una de las formas en que las personas pueden tener cubiertas sus necesidades de atención médica. Los Estados que quieren asegurarse de que toda la población tenga acceso a los servicios de salud ofrecen protección social contra la enfermedad, esto es, un sistema de seguro asequible o un programa financiado con fondos públicos que permite acceder a los servicios básicos de salud sin poner en peligro la economía de la familia.

Los distintos países tienen distintos enfoques de la protección social contra la enfermedad, pero todos tienen un elemento común, un sistema denominado de mancomunación del riesgo. Este sistema permite que un grupo numeroso de personas asuma conjuntamente el riesgo de enfermar y requerir una atención médica costosa. Los fondos destinados a la asistencia sanitaria se recaudan en forma de pago anticipado y se administran de tal forma que se asegura que todos los miembros del sistema comparten el riesgo de tener que pagar por la atención sanitaria, en lugar asumir ese riesgo cada uno por separado.

En un momento dado, las personas sanas, que sólo necesitan atención de salud limitada, están subvencionando la atención de las personas enfermas, que necesitan hacer un uso mayor de los recursos sanitarios disponibles.

El sistema de mancomunación del riesgo puede gestionarse de dos maneras:

1. Financiación a través de los impuestos: el Estado utiliza los ingresos que obtiene de los impuestos generales para financiar la atención sanitaria. Toda la población tiene acceso a los servicios: la cobertura es universal.

2. Seguro social de enfermedad: Los empleados, los trabajadores autónomos, las empresas y el gobierno aportan fondos para la atención sanitaria. Esos fondos se integran en uno o varios fondos de seguro social de enfermedad. Con este sistema de financiación, sólo puede lograrse la cobertura universal si se hacen aportaciones en nombre de todos los miembros de la población, y si las cotizaciones se individualizan según la capacidad de pago de cada persona. Por esta razón, la mayoría de los sistemas de seguro social de enfermedad combinan distintos tipos de fondos, y el Estado cotiza en nombre de las personas que no pueden hacerlo por sí mismas.

En algunos países, parte de la población está cubierta directamente a través de los impuestos generales, mientras que otras están obligadas a cotizar a un seguro social de enfermedad u otro tipo de seguro médico, que puede ser privado.

Temas y debates